La imaginación se desborda cuando no tenemos enfrente lo que suponemos existe y nos preguntamos si en realidad es como suponemos…
Hay hechos y recuerdos que nos dan razones para entender lo que sucede en la naturaleza humana, sus motivos para proceder de la forma como lo hacen. Entonces, todos los que están en ese espacio dentro de la embarcación, son conscientes de que algo hay detrás de los acontecimientos que están experimentando.
Por supuesto que en sus mentes están recibiendo la influencia de algo que no ven y que no sienten, pero que es una presencia en cada uno de ellos; todo empezó cuando soñaron con historias inéditas que la mayoría no pudo reconocer.
Solo algunos, muy pocos, las relacionaron con aquellos náufragos que en medio del mar hicieron un pacto con Neptuno para poder llegar hasta el otro lado del mar.
Se ha escrito tanto al respecto, en las historias del pasado y del presente inmediato, esos viajeros de trasatlántico están siempre en la mente de los que hacen comercio y turismo.
Por alguna razón, solo algunos lograron ver una enorme pared de agua que rodeaba a la embarcación en sus sueños…
Ares y Neptuno sonrieron y entendieron que, pese al paso del tiempo, siempre era posible encontrar a esos que se logran conectar con la inmensidad.
El siguiente paso estaba previsto para los días por venir; el personal de la embarcación se esmeró en atender de forma adecuada a los distinguidos pasajeros.
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