Hoy es el cumpleaños de Cheryl Gallagher, actual ministra de Cultura en el gobierno de Asgardia. Si lo vemos desde ese contexto, imaginamos una serie de actividades de competencia directa con lo manual, visual y musical… Ciertamente, todo eso representa a nuestra compañera Cheryl.
Siempre remito a la fuerza del cosmos para poder comprender la naturaleza que me lleva a crear un personaje o identificarlo en su acción por el mundo, la personalidad de Cheryl es sociable, ingeniosa y sabe cómo cautivar a los demás con su habilidad para la conversación, sabe moverse entre temas diversos y descubrir nuevos conocimientos. Esto la hace adaptable y siempre en evolución.
Desde el momento en que ella comenzó a viajar para promover a Asgardia e interactuar con figuras reconocidas en el ámbito científico, muchos se habrán preguntado: ¿Ciencia o cultura?
La respuesta nos lleva al entendimiento de que la cultura espacial influye en la educación, la economía y la política, moldeando la forma en que las naciones y comunidades perciben su papel en el cosmos.
Conceptos como la colonización de otros planetas, la economía espacial y la adaptación biológica en entornos extraterrestres forman parte de esta visión, donde la exploración del espacio no solo se considera un avance tecnológico, sino también una necesidad para la supervivencia de la humanidad.
A medida que la Tierra enfrenta desafíos cada vez más complejos, como el cambio climático y la superpoblación, la posibilidad de establecer comunidades autosuficientes en otros mundos se vuelve cada vez más atractiva.
La economía espacial, que abarca desde la minería de asteroides hasta el turismo interplanetario, ofrece oportunidades sin precedentes para el desarrollo económico y la innovación. Asimismo, la adaptación biológica implica una investigación profunda sobre cómo los organismos pueden evolucionar y prosperar en condiciones extraterrestres, lo que plantea preguntas fascinantes sobre la genética y la ingeniería biológica, y abre la puerta a una nueva era de descubrimientos científicos.
En consecuencia, es fácil entender que en mi obra pudo ser Olga, la mujer que, pese a dejar de estar presente en los procesos científicos, motivó a Wa54 a no caer, a seguir adelante con lo que sus antecesores estructuraron.
Más adelante, se convierte en el alma de la biblioteca de acopio bibliográfico de los Asgardianos que lograron poblar un exoplaneta.
Sabemos perfectamente que el lenguaje, los audios informativos, y los libros de la historia de Asgardia estarán en lo que todos ustedes conocen como DSL, por sus siglas en inglés, “la biblioteca espacial digital”.
En su estructura actualmente trabajan el presidente del comité de cultura, Ugur Aydin, al igual que Carol Lockhart a quien ya he mencionado líneas arriba.
Para un ser regido por el alado Mercurio, como lo es Cheryl Gallagher, no es difícil imaginarla como parte del clan de las Yao. Para quien no tenga claro qué significa esto, el término es un abreviado de la palabra náhuatl Yaocihuatl.
En mi obra, es hija de Erandi, sacerdotisa y guardiana de la luna; Ella tiene ese nombre y fue instruida por una lejana leyenda vinculada al Sol, con quien crea una poderosa estrategia para preservar el valor de los primeros Yao en su viaje a través de la historia: defensores, estrategas, amantes de los viajes y la investigación.
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