Como he señalado, hay lugares a los que debemos ir sin tener noción o certeza de lo que podemos lograr; es el caso de uno de los personajes principales de la historia que les voy contando a saltos…
Otros espacios son conocidos, pero en ellos no hay lo que necesitas para seguir un proyecto, entonces, eso fue lo que le sucedió a este personaje que ya había conseguido crear saltos cuánticos en la historia y cuya conciencia le daba facultad para entender que el poder de uno es el poder de todos.
Sin plena conciencia de cómo se establecieron los parámetros de relación, lo que más importaba era que hubiera sido en vida un navegante, que tuviera una mente ágil y perspicaz, cuya idea central se focaliza en relacionar el mar con el espacio profundo. La frase: “Como arriba es abajo”, nutrió sus conocimientos y le alentó a ver un mapa en las estrellas y ser el precursor del astrolabio.
Necesitaba algo de contexto y un poco de la esencia de un humano, más allá de ser un personaje entregado a la noción del poder que brinda el conocimiento.
Sin embargo, muchos de mis compañeros y compañeras han llegado hasta Asgardia en busca de esa noción maravillosa de ser navegantes de las estrellas; solo necesitaba la inspiración de alguien y me costó algo de trabajo descubrirlo. Seguí el texto de mis libros, cuyo contexto implicaba convertirlo en el apoyo logístico del personaje que había llegado a las estrellas.
En el espacio hay grandes nebulosas y todas ellas impiden ver la profundidad de lo que hay detrás. Son nubes formadas en su mayoría por hidrógeno, y se asemejan a los bancos nubosos que hay en los recorridos de los grandes navíos… Cuando se desvanecen, ves lo que necesitas; te das cuenta de la luz que brilla y brillará a pesar de estar detrás de una nebulosa.
En consecuencia, la evidencia estaba ahí. Aparece el hombre que observa desde el faro, Clive Simpson. Incluso detrás de las nubes es fácil adivinar la difusa luz que poco a poco te advierte dónde está el sitio para dejar caer tu ancla.
Cada constelación toma una nueva perspectiva, más allá de los nombres que ya se les han dado y que históricamente no podremos modificar. Desde otro enfoque y desde otra galaxia, esos nombres no han sido revelados, entonces posiblemente cumplen, en la mirada de los exploradores que hasta hoy desconocemos, un nuevo paradigma y una tarea por conocer.
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