El hombre se da cuenta de que es observado por diversos unicornios…
Es el momento en el que escucha a la mujer que le pregunta:
—-Galante caballero, quien te ha dado a conocer el sitio de mi refugio y que te alentó a venir hasta aquí.
El hombre algo inquieto sabía que estaba siendo escuchado por los demás corceles, al momento que señaló:
— Hasta mi casa llegó hace algún tiempo un gato y el protege mis sueños y hay ocasiones en las que me indica senderos y circunstancias que con el paso del tiempo he descubierto que son algo más que simples sueños.
La mujer se quedó en silencio y meditó antes de responder… Entonces dijo:
— Un emisario mágico no es asunto sencillo de rechazar, usted vino por un motivo o por un deseo profundo.
El caballero, algo contrariado, explicó:
— Ese gato me entiende y sabe lo que soy y lo que siento, incluso sabe advertirme de algunos peligros. No creo estar ante un peligro, aunque admito que sus corceles me han intimidado. Posiblemente, mi gato ha pensado que al encontrarme con usted podría descifrar algunas interrogantes que me han aquejado.
— Tendrá que ser muy claro y preciso en sus preguntas, mis corceles saben cuándo alguien miente o inventa pretextos para quedarse con alguno de ellos.
—Señora, yo sería incapaz de algo así. Debo admitir que me ha traído la curiosidad, usted es una dama muy bella y al mismo tiempo la percibo inalcanzable, el hecho de estar aquí hablando con usted me sorprende gratamente.
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