La mayoría piensa que la vida en el sistema solar desaparecerá cuando el sol abrace a Mercurio y Venus, pero antes de que eso suceda alguien más habrá hecho un trabajo delicado y exhaustivo para acabar con la vida en el tercer planeta desde el Sol.
¿Quieres saber a qué me refiero?
Por un lado, está el trato y desgaste que recibe la Tierra por las actividades antropogénicas. De ser así, la palabra “antropógeno” proviene del griego: “anthropos” (hombre) y “genos” (origen). El geólogo ruso Alexey Pavlov fue el primero en utilizar este término para referirse a las influencias humanas sobre las comunidades vegetales.
Por lo tanto podemos percibir de manera muy definida que el calentamiento global antropogénico (AGW) se refiere al cambio climático acelerado causado por las emisiones humanas, desde el surgimiento de la Revolución Industrial. Actualmente, más del 90% del calentamiento global se atribuye a las actividades humanas.
Probablemente no podamos criticar este tipo de uso de la tierra y gestión de la sostenibilidad como parte de las actividades de un potencial depredador, a pesar de que cada ser humano necesita aprovechar los frutos de la tierra; Sin embargo, existe una actividad potencialmente destructiva que no responde en ningún momento a su necesidad de crear sustento para su pueblo o servicios para compartir con la humanidad, me refiero a su deseo de combatir con armas de fuego a quienes no forman parte de sus creencias. destrucción masiva.
