Los ocho firmantes de esta declaración, lo hacemos tomando en consideración que sería una tarea enorme renombrar a las estrellas que fueron parte de la historia de todos aquellos humanos que habitaron el pasado en la historia del planeta Tierra.
Sus descendientes, muchos de ellos hombres y mujeres que nos dieron sus genes para viajar hasta este hospitalario y a la vez inhóspito planeta en el espacio lejano, deben comprender con claridad el valor de nuestras palabras:
Al cerrar las puertas y avanzar hasta el sistema solar que observa de cerca el vientre del Centauro, dictaminamos que cada uno de los nacidos en Hadarian, se liberan de toda ideología, teología, creencia mística y tradicional que no proceda de nuestra propia experiencia.
Afirmamos que cada uno de los nombres de las estrellas que nos han dado personalidad jurídica y cada una de sus características son el diseño que soporta la estructura de un nuevo mundo donde cada uno de sus pobladores, todos los nacidos en Hadarian, no reconocen ninguna forma de esclavismo, tampoco de sumisión patriarcal o matriarcal.
Declaramos desde el planeta del cual somos residentes, que somos ciudadanos libres, respetuosos de las leyes naturales, y cada una de las regulaciones que redactamos para crecer en términos de equidad, igualdad y libertad de elección en dignidad y apego a nuestros propios valores.
Queremos que todo poblador del planeta Tierra reconozca nuestra plena independencia del pasado. Si tuviéramos conocimiento de algún poblador del planeta Tierra que siendo pariente consanguíneo y con creencias históricas ajenas a nuestra filosofía y visión cósmica que construimos día a día, en busca de perfeccionarla al cuidado del sistema planetario que ahora nos acoge, que comprenda claramente que no podrá influir y tampoco tratar de influenciarnos con sus ideas ancestrales.
Reiteramos nuestra posición negando todo vínculo con la historia que no nos pertenece, aun siendo descendientes directos de algunas de las personas cuya cultura, creencias, leyendas y tradiciones sostuvieron por siglos.
Nuestro líder Hadar, nuestro planeta Hadarian y todos los nacidos en su suelo, firmamos y declaramos en unidad nuestra soberanía y respeto a la soberanía de otros pueblos del planeta Tierra, cuerpos celestes y satélites donde los pobladores de la Tierra habiten ahora y en el futuro.
Hadar y Ariel redactores del dictamen,
LuzMa, Orby, Kaus, Askella, Nunki
y el maestro Wa 54 como representante de todos los exploradores que viven y construyen nuestro mundo, incluso aquello que han perecido luchando por preservar la vida en Hadarian.
(Por supuesto en el libro para ponerse de acuerdo primero tuvieron que calmar a Hadar y Wa54 lo único que pudo hacer es permanecer expectante, no podía influir en las palabras de los genuinos pobladores de Hadarian, después de algunos porrazos en la mesa por parte de Hadar y la inteligencia equilibrada de Ariel para tolerar por un lado sus exabruptos, el dictamen quedo de la siguiente manera y merece la pena hacerlo público para mis amigos que sé que me leen y siguen, muchas gracias)
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