Uno de los temas que más inquietaba a los astrónomos era la pérdida de visión hemisferica de la bóveda celestes, así que cundo se empezó a difundir el trabajo de Atl Ometehcutli, algo rondo en la cabeza de algunos y algunas de los astrónomos

Estos elementos generan contaminación lumínica y afectarán cada vez más la privilegiada observación astronómica de algunas partes del planeta.
La reacción no se hizo esperar y por supuesto esto era un caso para todo observador atento del cielo, Atl se dio cuenta que había personas consternados con la basura espacial.
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