Los Pegasus algo desconcertados se preguntaron qué hombre viviría en las playas de un área volcánica y uno de ellos se lo hizo saber:

Estimado caballero qué le impulsa a vivir tan cerca de la presencia de los volcanes, debe ser difícil sobrevivir en este paisaje.
El anciano con gran alegría contestó:
Hermano del aire y la tierra, yo soy un ser del mar y no veo el peligro, observo las maravillas qué me rodean y me regocigo en lo que poseo.
De no ser por el fuego ustedes no estarían aquí y de no ser por las señales del volcán no podrán saber que camino seguir, pero antes debo hacer algo por ustedes, vengan, sigan mis pasos, no estamos lejos…
Ahora por esta ocasión te dejo el texto que sigue en el audio:
Photo by Clive Kim on Pexels.com
Debe estar conectado para enviar un comentario.